FANTOMEX, un ladrón es siempre un ladrón.
Ya puedes adquirir en Milcomics.com la primera entrega de la nueva serie dedicada al mayor ladrón del universo Marvel. Y cumple con lo que siempre hemos querido: ver a Fantomex en una serie adulta y sin ningún otro héroe intentando moralizarlo. El elegante mutante en su impoluto uniforme blanco, sin restricciones, y peleando según sus reglas.
Creado por Grant Morrison en sus New X Men como una de las nuevas Arma X, Fantomex era un antiheroe que justificaba sus actos con una retorcida moral, heredada de una vida ficticia que él mismo creó. En está nueva serie se llega a vislumbrar un poco de lo que puede ser su verdadero pasado. Nuevas cuestiones que surgen de una colección que homenajea a la principal fuente de inspiración para su creación, Diabolik y la sicodelia de los 60.
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El Fantomex mas desatado y menos heroico desfila por las paginas de esta obra, que sólo podía encajar en la Linea Max de Marvel. Violencia explicita, lenguaje malsonante y muchas referencias sexuales pueblan las paginas de la obra. Y no es gratuito, son los elementos que caracterizan este tipo de historias entre lo kitsch y lo pulp. El hombre capaz de robar cualquier cosa se ve enfrentado a una conspiración que puede destruir gran parte del planeta, tiene que salvar a la agente federal que lo persigue, y de paso evitar que su compañera robot no muera de celos. ¡Y ademas hay aliens, monstruos submarinos y un meteoro gigante! Los ingredientes de un gran folletín, aderezado con un montón de peleas e ingenios imposibles a cada cual mas extraño.
Y con todo Esto, Andrew Hope urde un homenaje a muchas fuentes, que supera la influencia inicial de Diabolik y se involucra en una historia de espías típica de James Bond, para acabar en un relato pulp. Si el lector busca con atención encontrará muchas referencias a estos géneros literarios y cinematográficos. Fantomex es una obra de divertimento puro y duro que no defraudará. Hope se ha empleado a fondo para que todo discurra a la velocidad necesaria para que nadie se despegue de las paginas. Divertida, irreverente, y por momentos histrionica, esta parodia superheroica de las pelis de espías da lo que promete: diversión, acción, misterio y bellas mujeres con poca ropa.
Y si un guión mal escrito no hay manera de arreglarlo, si el arte flojea tampoco. Pero no es el caso tampoco del apartado gráfico de este cómic. El tono de Shawn Crystal se mantiene entre el cómic de superhéroes y el humor paródico, y es justo el que necesita la serie. Si se tomara completamente en serio o demasiado en broma, no funcionaria, pero Crystal encuentra el punto exacto para que se disfrute, sin que se haga ridícula o se convierta en una historia más de “superhéroe salva la situación y se queda la chica”. El dibujante que despuntaba en Masacre, aquí se encuentra más recatado en la locura y mucho más maduro en sus formas. Y todo eso aderezado por entramados, iluminaciones y un color con aires sesenteros, que completan el homenaje a la sicodelia.
Este tomo es una pequeña muestra de lo que el personaje puede dar más allá del mundo mutante marvelita. No será la última, porque el lector acaba pidiendo más robos, más humor, más acción, más romance… En resumen: más Fantomex
Mil héroes: el blog de Mil Cómics 